
Uno de los factores que refleja el estado de crisis que se vive es la búsqueda en la dotación de comida. La crisis nacional, producto de diferentes variables (la iflnación, el incremento en los servicios públicos y los índices de pobreza) continuaron su impacto y esta en vez con un indicador preocupante. En apenas un mes la cantidad de catamarqueños que solicitaron bolsones con alimentos casi se vio
duplicada.
Así lo reflejan los números que maneja en el ministerio que tiene a Eduardo Menecier como su titular (Desarrollo Social). Fuentes de esta cartera no dudaron, cuando este medio le preguntó, sobre la entrega de módulos alimentarios. “Está muy complicada la situación”, fue la respuesta descriptiva que arrojaron
¿El motivo? El incremento que hubo en la cantidad de comprovincianos que diariamente pasan por el Centro Administrativo del Poder Ejecutivo (CAPE) para solicitar la asistencia de alimentos mediante la entrega de “bolsones”. Los números que manejan en Desarrollo Social son un indicador de ello. De 500
personas subieron hasta las “700 que pasan todos los días por el CAPE”, promediaron en dicha cartera
del Ejecutivo.
Pero ese no es el único dato que refleja la crisis nacional la cual, lógicamente, repercute en todas las provincias y no deja exenta a los municipios. Basta recordar que el propio intendente de Belén, Daniel “Telchi” Ríos, había comentado el regreso de “las mamaderas verdes” (supliendo la leche por mate cocido)
La búsqueda de asistencia alimentaria, según comentaron funcionarios de Desarrollo Social, se vio acrecentada fuertemente en apenas un mes: marzo.
Si bien existe una cuestión estacional -el cierre del primer trimestre del año viene acompañado con el inicio del ciclo lectivo- no se debe descartar el impacto de otras variables que golpearon directamente en los bolsillos.
¿Cuáles? Principalmente la iflanación, que lleva atada consigo la pérdida del poder adquisitivo y ataca directamente a los sectores más vulnerables. Otra variable que se sumó a marzo fue el aumento en los servicios públicos como consecuencia de resoluciones nacionales.
En este último sentido se trata, puntualmente, en el aumento del transporte urbano de pasajeros y el incremento en el costo en la tarifa de energía.
Ahora bien, de acuerdo a la información que maneja la dirección de Acción Directa, para lo que fue enero y febrero de este año la cantidad de asistencia a través de bolsones oscilaba entre los 8.000 y los 9.000 módulos.
Sin perjuicio de ello, en marzo casi duplica (de tener en cuenta la cifra más baja) la cantidad de pedidos de bolsones. De acuerdo a lo que expresaron funcionarios de Desarrollo Social para el citado mes el número de asistencia alimentaria trepó hasta alcanzar los 15 mil bolsones.
Para ponerlo de forma porcentual al crecimiento: si se toma como base los 8000 bolsones, a marzo el aumento subió un 87 por ciento; de contrastar los 15.000 módulos alimentarios con los 9000, el número baja al 66 por ciento.
En dicha cartera evalúan que esta cifra podría llegar a incrementarse en el caso de establecer una proyección. Es que para abril -mes que aún no terminó- y según confirmaron en la cartera que conduce Menecier ya “estamos pasando los 15 mil módulos”.
A todo ello se debe mencionar que el costo de los alimentos aumentó, acumulativamente, un 65 por ciento. Por este motivo, explicaron, en febrero la cartera de Desarrollo Social había lanzado una licitación para la compra de alimentos previendo así un paliativo a la situación.