
Una médica residente de cirugía denunció que en una clínica privada no la dejaban atender a un paciente accidentado porque el hombre no podía pagar la intervención quirúrgica. Por esa razón, renunció a su cargo.
“Recién me tuve que pelear con la enfermera y directora de la clínica. No me dejaban suturar a un hombre que se cortó el pie con una amoladora porque no lo podía pagar. Lo suturé igual y renuncié. Prefiero siempre al Estado antes que al vil empresariado. ¡Aguante la salud pública!”, posteó este jueves.
A lo que agregó: “Cuando le dije a la directora que mi deber como médica era la asistencia sin importar los medios económicos que tenga el paciente me dijo ’no, en los privados las cosas no funcionan así’”.
“En los privados no se hace medicina, se hacen negocios y los productos son seres humanos”, concluyó la joven médica que en Instagram se declaró “llorosa y desempleada pero con la conciencia tranquila”.